Trabajar y pasar más tiempo con la familia o disfrutar del tiempo libre, es algo que preocupa a muchas personas que quieren desarrollar una actividad profesional sin dejar desatendidas otras facetas de su vida personal y familiar.
Las personas, a lo largo de su vida laboral activa, van a pasar por una serie de etapas en las que van a tener que tomar decisiones que se adapten, lo mejor posible, a sus circunstancias particulares para afrontar las distintas responsabilidades laborales y personales.
Unas personas van a preferir dedicarse completamente a atender a sus seres queridos, otras optarán por un trabajo a tiempo parcial, para otras la solución ideal será tener un horario flexible y otras un apoyo en servicios que les acompañe en las labores y compromisos de su día a día, o una combinación de estos recursos, ¿por qué no?
Como hemos viniendo comentando en post anteriores, muchas son las buenas soluciones que se plantean en pos de alcanzar la tan anhelada conciliación de la vida laboral, personal y familiar.
Estas diferentes opciones son motivadas en muchos casos por las circunstancias personales y familiares de cada persona.
Los hay que cuentan con un entorno familiar o social muy cooperativo, que le puede ofrecer un apoyo o aquellos que tienen a su cargo una persona que requiere de unos cuidados muy específicos y necesite de un servicio de calidad adaptado a estas necesidades particulares.
Lo importante es que haya distintas soluciones al alcance de la mayoría que se adapten a las circunstancias particulares de cada persona y situación personal o familiar, que permitan que puedan elegir con la mayor libertad posible y que nadie quede excluido del mundo laboral, permitiendo a hombres y mujeres acceder y/o proseguir su carrera profesional, si este es su deseo, sin tener que renunciar a otros aspectos de su vida.
Desde la AESP abogamos por que, acompañando a otras buenas soluciones que permitan la Conciliación efectiva de la vida laboral y familiar, se apueste también por políticas que favorezcan a la mayoría, el acceso a los Servicios a la Persona.
Los Servicios a la Persona acompañan a las personas y familias para que esa planificación sea satisfactoria y lo mejor aprovechada posible para sus miembros, no solamente durante las horas destinadas al trabajo, donde se hace muy necesario un apoyo en lo relativo a atender las tareas del hogar y el cuidado de los seres queridos, sino también aportando “más tiempo de calidad” a aquellos momentos en los que se puede disfrutar en familia o en aquellas actividades de ocio que contribuyen a tener una vida saludable y equilibrada.